El viaje de Clinton es el primero de una histórica campaña diplomática de la Casa Blanca que incluye la visita en los próximos días de la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano y el secretario de Justicia, Eric Holder, poco antes de que el propio presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegue a territorio mexicano el 16 de abril.
Esperando a Obama
La visita de Clinton se produce un día después de que Washington revelara un nuevo plan para fortalecer la seguridad fronteriza que contempla una inversión de US$700 millones.
México saluda plan de EE.UU.
El gobierno mexicano calificó el viaje de los altos funcionarios estadounidenses como "el inicio de una nueva era" en la cooperación bilateral.
Crisis e inseguridad
Sin embargo, este discurso contrasta con el clima de tensión generado en los últimos días luego que México aumentara los aranceles a 90 productos estadounidenses en medio de la llamada "crisis de los camiones" que puso en jaque el cumplimiento de uno de los acuerdos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Las actividades de los grupos criminales son una amenaza para los dos países
Patricia Espinosa, secretaria de Relaciones Exteriores de México
Pero no sólo eso. El presidente mexicano, Felipe Calderón, había acusado públicamente a su vecino de no hacer lo suficiente para controlar el tráfico de armas a través de la frontera, frenar el consumo de drogas e investigar a los funcionarios estadounidenses que presuntamente podrían estar protegiendo la operación del crimen organizado
