El presidente Alan García, denunció ayer sábado 6 que Perú está sufriendo una agresión "subversiva" contra la democracia a la que el gobierno debe responder con "serenidad y firmeza. Señaló que es una agresión “cuidadosamente preparada contra el Perú, una conspiración que ha interrumpido la producción y el transporte de petróleo, el envío de gas y habló de insurgencia y levantamiento en las últimas semanas". Lo mismo de siempre: los gobiernos burgueses y empresariales acusan con el mayor cinismo y desparpajo al pueblo, a los miserables, a los explotados, de “subversivos” cuando éstos protestan y luchan para defender sus derechos; en vez de reconocer que los mismos gobiernos son los culpables del saqueo, la miseria y la desesperación de los indígenas o campesinos.2. Aunque los problemas del Perú vienen de hace muchos años vuelven a manifestarse el viernes 5 cuando los indígenas iniciaron sus protestas para oponerse a planes que autorizan la perforación en busca de petróleo y gas en tierra ancestral. Exigen al Congreso que revoque las nuevas leyes que promueven la minería extranjera en el bosque tropical. Ante la represión gubernamental que apresó a 80 indignados, los indígenas manifestantes, que han aprendido a defenderse, tomaron como rehenes a 38 policías, al menos nueve de ellos murieron al tiempo que el ejército avanzaba para liberarlos. Se trata, al parecer, de la peor ola de violencia en Perú desde el fin de la insurgencia del grupo Sendero Luminoso en la década de 1990 y el desafío más grande que debe enfrentar el presidente Alan García desde que asumió el poder en 2006. 3. Sucede en Perú lo mismo que en México, Colombia y varios países donde los gobiernos neoliberales han estado imponiendo programas privatizadores que sólo benefician a unos cuantos inversionistas y hacen más miserable a la población. Hace un año, según la escasa información que circuló por los periódicos en aquellos días, en los departamentos de la región selvática se paralizaron las actividades en varios días de la semana, ya que los habitantes de estas regiones protestan contra una legislación propuesta por el gobierno de Alan García y que modifica los criterios para ejercer la propiedad en estas regiones. Este hecho de julio de 2008, abrió ampliamente la puerta a la privatización de grandes territorios habitados, de acuerdo con sus costumbres y cultura, por poblaciones indígenas. 4. Perú, con unos 30 millones de habitantes, hace vecindad con Ecuador al norte y Bolivia al sur, dos países no gratos para el gobierno de los EEUU por encontrarse en el círculo de Hugo Chávez y Fidel Castro; pero también Perú es vecino de Chile, Colombia y Brasil, o sea, se encuentra en Los Andes en una zona sísmica desde el lado geológico, pero también volcánica desde el punto de vista político. Si bien las viejas guerrillas de Hugo Blanco y de De la Puente Uceda de los años sesenta no lograron desatar grandes fuerzas, en Perú han reiniciado sus movilizaciones los indígenas, campesinos y obreros, entre los cuales están los trabajadores de las minas. Por otro lado Ollanta Humala, excandidato presidencial, parece haber agrupado en el último proceso electoral a un gran sector de izquierda que podría contribuir en la denuncia contra ese gobierno proyanqui. 5. El gobierno proyanqui de García ha querido culpar al indio Evo Morales de la rebelión india en el Perú para congraciarse con los EEUU; pero los acontecimientos han ocurrido en el norte peruano, por la frontera colombiana y del Ecuador. ¿Qué tal si se hubieran registrado por el sur? Es obvio que en toda la América india hay sentimientos de simpatía hacia Evo Morales y su revolución pacífica, pero no puede acusársele de creador del descontento. Se ha dicho que el oligarca Alan García ha descubierto la ambición de Evo Morales “que quiere ser representante no sólo del pueblo altoperuano sino de muchos otros bajoperuanos”. El grave error de todo este enredo lo cometió Alan García al tildar a Morales como un enemigo personal, subestimando el poder de los movimientos étnicos y de las aguas que una multitud de indígenas peruanos apoyan.
Mostrando entradas con la etiqueta Gobierno Peruano culpable. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Gobierno Peruano culpable. Mostrar todas las entradas
martes, 9 de junio de 2009
lunes, 8 de junio de 2009
Gobierno Peruano Debe responder Por Actos De Violencia en Selva Amazonica
Lima. Con el toque de queda, volvió la calma a la región de Bagua, escenario de sangrientos enfrentamientos que comenzaron con la represión a un grupo de indígenas que bloqueaban una ruta y culminaron con una toma colectiva de rehenes, hechos que dejaron al menos 31 muertos, según el gobierno. En tanto, el líder indígena Alberto Pizango, presidente de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Amazonia (Aidesep), desapareció tras decretar el Poder Judicial una orden de busca y captura contra él. Pizango lidera desde hace dos meses las protestas para pedir la derogación de varios decretos que promueven el establecimiento de empresas madereras y petroleras en la zona. Los indígenas sostienen que de esa forma se ponen en riesgo sus derechos ancestrales sobre las tierras que ocuparán las empresas y se contaminará el ambiente. "El autor intelectual, el agitador y cobarde ha huido, seguramente buscando que lo protejan en Bolivia, pero la mano de la Justicia tiene que llegar sobre él y los autores materiales de la masacre", apuntó la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas. "Es una información que nosotros hemos recogido. Esta fuga se habría dado hacia el sur", aseveró. Sin embargo, el vocero del gobierno boliviano, Iván Canelas, dijo no tener información de que Pizango se encuentre escondido o refugiado en su país. Aidesep como el gobierno se acusan mutuamente de la responsabilidad en la ola de violencia desatada el viernes cuando la policía intervino para desbloquear una carretera vital en la región del Amazonas, en el punto llamado "Curva del Diablo". Aidesep asegura que los nativos muertos en las refriegas son no menos de 30, y su vocero Shapión Noningo Sesén, que dijo desconocer el paradero de Pizango, denunció que al mediodía de ayer "muchos cadáveres" seguían sin ser retirados de las afueras de Bagua. Pero el hecho que más criticó el gobierno fue el posterior secuestro de 38 agentes de policía que intentaban desalojar una estación de bombeo en Imazita ocupada por los indígenas. El gobierno sostuvo ayer que nueve de esos policías fueron asesinados a sangre fría por los indígenas, aparentemente antes de que se produjera el operativo de rescate, cuando los rehenes dialogaban con sus captores en busca de una solución. Además, había un agente herido de gravedad, tres desaparecidos y 25 que fueron rescatados, según el jefe de la Policía Nacional del Perú
Etiquetas:
alan garcia vden patria,
Gobierno Peruano culpable
Suscribirse a:
Entradas (Atom)